Nuevamente! este super capi kilométrico es para compensar no haber actualizado en 4 días, ademas de volverlo a dedicar a mis amigas Emii A. y a las niñas que ganaron y particparon en el concurso del page de Emma Watson - Fans Perú :) a: Nayla, Mily, Sheila y Miriam! :) espero que les guste :)
_____________________________________
CAPÍTULO O7: REFUGIO
- No tiene caso, Hermione...- Decía el pelirrojo con un tono cansado.
Habían caminado por más de dos horas tratando de encontrar a los demás, pero no funcionó. No habían querido ultilizar magia tampoco, porque en ese bosque podian haber muchos muggles. A Hermione le costaría su trabajo en el Ministerio de Magia y a Ron... bueno a Ron el reto de su madre.
Ron lo único que hacía era caminar tras la castaña, rogándole que se detuviera. Él también estaba preocupado ¿qué pasaba si no los encontraban? Ron no podía cocinarse sólo y sabía muy bien que Hermione no era buena en eso.
La fatiga los envolvió después de un rato, y se detuvieron a descarnsar un poco. El cielo se habia puesto gris y unas pequeñas y débiles gotas caían sobres ellos. El frío se hizo presente también y Ron veía como Hermione comenzaba a temblar, así que se acercó a ella y se quitó la chaqueta para dársela, ella lo miró sorprendida.
- ¿Qué haces? - Le preguntó de inmediato y no pudo evitar sonrojarse.
- Tienes frío y... - comenzó a decir el pelirrojo pero no pudo terminar porque fue interrumpido por un abrazo de Hermione. Él se quedó petrificado, nunca esperó un gesto así de ella y menos en ese momento.
- Vamos, Ron, debemos buscar un lugar para pasar la noche - La castaña miró el cielo - Se acerca una tormenta.
Él asintió aún confundido y cuando la chica comenzaba a caminar, Ron reaccionó y la detuvo.
- Espera, Hermione... me parece que es mejor usar magia para que nos encuentren, no pienso quedarme aqui en este bosque... - dijo mirando a su al rededor. Todo se habia vuelto oscuro, la noche había caído ya.
- Ron...
- No, Hermione, quiero salir de aquí, no me importa el castigo que me den por hacer magia en un lugar repleto de muggles... - Dijo el pelirrojo decidido - Sé que en la prisión de Azkaban la pasaré mucho más bien que en este lugar tan tenebroso - Buscó su varita entre las cosas de su mochila. Cuando la encontró apuntó con ella al oscuro cielo, pero antes de pronunciar palabra alguna miró a la castaña.
Hermione estaba nerviosa... nadie sabría lo que pasaría.
- Tranquila... - Le dijo el pelirrojo - ¿Quieres salir de aquí?
La castaña asintió con la cabeza, algo temblorosa, por los nervios y por el frio que hacía. Entonces Ron no lo dudó más y aún con la varita en alto pronunció.
- ¡PERICULUM!
Nada sucedió. Ron pensó que se había equivocado al lanzar el hechizo y miró a Hermione pidiendo ayuda. Ella también había pensado lo mismo, por lo que alzó su varita y dijo:
- ¡PERICULUM!
Pero no pasó nada. Los chicos se miraron entre sí, no entendian que pasaba. Y simplemente llegaron a la conclusión de que en ese bosque no se podía hacer magia.
" Bien " - Pensó Ron - " Ahora si que estamos perdidos. "
Hermione suspiró y sólo pudo decir:
- Sigamos caminando...
Una hora más caminando se había echo más que larga. Ron había comenzado a quejarse porque estaba cansado o porque sentía hambre. Hermione no decía nada, pero estaba tan cansada y hambrienta como el pelirrojo. Pero Ron no se detenía a callarse por lo que la castaña le tomó la mano para que se apurara...a tal contacto fisico el pelirrojo se cayó de inmediato y sus orejas comenzaron a ponerse rojas. La mano fría y suave de Hermione le producía unas mariposas inexplicables en el estómago, ese estómago vacío en ese momento. Pero a pesar de todo, eso se le olvido y se aferró a la mano de Hermione para ayudarla a caminar entre las ramas. La miraba de reojo varias veces para poder creer que eso estuviera pasando de verdad, y ahi la veía cada vez que la miraba... junto a él. Ni siquiera se había dado cuenta de que llovía a cántaros, mojándolos completamente. Y luego comenzó a pensar ¿Cómo sería la vida sin ella? de seguro él no viviría. Sentía tantas cosas por ella, estaba TAN enamorado que verse sin Hermione en su vida sería una locura. Y justo cuando pensó que se hundiría en sus pensamientos, sintió la mano de Hermione apretarla contra la suya. La miró rápidamente para saber lo que sucedía y vió que la castaña miraba fijamente a un lugar entre los árboles. No dudó en hacer lo mismo y lo primero que vió fue una pequeña cabaña como la de Hagrid.
- ¡Por Merlín, estamos salvados! - Exclamó Ron con felicidad y cuando se disponía a caminar, Hermione lo tiró del brazo - ¿Qué sucede?
- ¿Dónde crees que vas? - Le preguntó la chica con el ceño fruncido.
- Me dirijo a esa cabaña, Hermione, ya que, por si no lo recuerdas, estamos perdidos hace más de 4 horas, y por si no te haz dado cuenta, llueve como si se fuera a caer el cielo - Le respondió Ron como si fuera lo más obvio del mundo.
- ¿Y... qué haremos...? - Preguntó insegura.
- Pues... ir a la cabaña y decir lo que nos ha pasado... pedir ayuda, Hermione - Le informó el pelirrojo incapaz de creer que él sabía lo que había que hacer y ella no.
Caminaron lentamente hacía la pequeña casita de madera que se encontraba frente a ellos. Y aún de la mano, Ron tocó la puerta... Nadie respondió por lo que el pelirrojo lo hizo de nuevo. La puerta se abrió de par en par, sin que el chico haya echo algo.
- ¡Ron! - Dijo Hermione pensando que el pelirrojo había sido el que abria la puerta.
- ¿Qué? ¡No, yo no fui! - se defendió - No se como pudo abrirse... pero me parece que no hay nadie. ¿Qué sucede si...?
- No, Ron, no entraremos. - Dijo Hermione decidida.
- ¿Te quedarás aqui muerta de frío y con la lluvia mojándote entera? - Le preguntó a la castaña aún con las manos en la puerta, y al ver que ella no respondía él dijo - Pues yo no... - Y después de eso entró muy lento a la cálida cabaña, en donde la chimenea se encontraba encendida.
Miró a su alrededor y pudo ver muebles rústicos, una pequeña cocina, una cama y un cuarto de baño. Definitivamente alli vivia gente, porque había mucha comida y ropa encima de la cama. La cabaña estaba muy bien adornada.
Hermione había entrado también pisándole los talones a Ron sin que él se diera cuenta.
- Esto es perfecto... - Susurró Ron con una sonrisa.
- Lo es... - Dijo Hermione mirando al pelirrojo y sonrieron los dos encontrando sus miradas.
Luego de un rato los dos habían ocupado la ropa que estaba en el pequeño armario o encima de la cama. La ropa mojada la colocaron frente a la chimenea y Hermione seguía diciendo que eso no era correcto que debían irse de ahí.
- 'Erma'ony no 'ebes p'eocupa'te...
- Ron, cuando tragues lo que llevas en la boca me hablas, ya que así no te entiendo nada - Dijo Hermione un poco molesta, pero luego comenzó a reír al ver al pelirrojo con tantas ganas comiendo. Ella se sentó a su lado e hizo lo mismo, moría de hambre. Comieron pan, galletas, de todo un poco de lo que había ahí, y luego cuando la fatiga se había ido Ron suspiró y se llevó las manos al vientre.
- ¡Wow! Ahora si me siento bien...
Hermione rió y puso los ojos en blanco.
- Es hora de dormir, estoy un poco cansada - Dijo la castaña mirándolo con ternura. Se levantó de la silla, y se dirigió a la cama, pero se quedó paraba en frente de ésta.
- ¿Qué sucede? - Preguntó Ron extrañado.
- Es que... - Hermione se volteó para mirar al pelirrojo, y al hacerlo Ron notó que estaba ruborizada - hay ... sólo una cama - Terminó de decir.
- oh... - dijo Ron - pero.. no es problema, digo... tú puedes dormir alli, yo en el sofá.
- No es necesario, Ron.. yo dormiré en el sofá - Dijo Hermione decidida.
- ¿Estás loca? - Le dijo él - Tú descansa... aquí hay muchas frazadas para taparme - Sonrió - Buenas noches.
Ella se le quedó mirando un momento, con la sonrisa aún en la cara y se encaminó hacia él para besarlo en la mejilla.
- Buenas noches...
Su beso fue tan cálido, que Ron sintió que ella aún estaba ahí besándolo. Nunca sabía cuando Hermione lo sorprendería, pero cada vez le gustaba más lo que ella hacía.
Vió como Hermione se acostaba y unos minutos después se quedaba dormida. La observó mucho tiempo, la miraba y estaba pendiente de lo que ella pudiera hacer. Estuvo más de una hora en esa posición, viendo cada movimiento, escuchando su respiración y no pudo evitar suspirar.
Se sentó frente a la chimenea un momento. Estaba muy cansado pero no podía dormir. Pensaba en muchas cosas, pero la principal era ella. ¿Acaso el beso que le dió hace un año fue por nada? ¿Fue por que sí? Lo recordaba como si hubiera pasado un segundo antes, ese recuerdo estaba en su memoria y sabía que no se iría fácilmente. Y es que debía admitirlo... La amaba, la amaba como nunca amó a una mujer en su vida. Le gustaba observarla, le gustaba escucharla gritar o enojarse, le gustaba verla hablar, suspirar, sonreír... Y es que decir todo lo que le gusta de ella le costaría toda la noche, por lo que sólo pudo pensar una cosa:
" Me enamoré de Hermione Granger..."
3 comentarios:
ESTA MUY ITNERESANTE LA HISTORIA.. PERO HAY MAS CAPITULOS YA??????? DONDE LOS PUEDO LEER
Al entrar a la casa te faltó "Homenum Revelio".
(¡Qué raro que a Hermione no se le ocurrió! - Jajajaja)
Genial. ¡Éste no es muy LEMON! :)
¡Qué tonta que soy!
Cierto que ahí no se podía hacer magia. MAL COMENTARIO. :)
Publicar un comentario