martes, 23 de agosto de 2011

SOÑE CON HERMIONE_cap 19

Esta es la primera actualización por ser el cumpleaños del Pelirrojo mas Sexy del mundo! Feliz cumpleaños! Donde estes! Rupert Grint!
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CAPÍTULO 19: " CAIDAS Y LEVANTADAS "
-Bien… a ver dime si no te ajusta si? – el pelirrojo iba subiendo lentamente el cierre, mientras la castaña parecía caer en un sueño en el que solo estaban los dos, sintiendo sus respiraciones pausadas y tibias, era un ambiente perfecto, ella ladeaba su cuello mientras que sentía los lentos suspiros de él. Parecía una lenta tortura para ambos, no habían tenido un encuentro tan… tan… cercano desde hace mucho tiempo, solo se limitaban a besos cortos y casi de niños; tenían a los profesores encima y los preparativos para el baile, en fin!
La castaña no soporto más la tortura, estaban solos y lejos de sus padres, ¿qué podría pasar? Ron ya había terminado de cerrar el vestido Maxim que llevaba su novia, tocaba lentamente el resto de espalda expuesta, subiendo hasta sus hombros, acercándose lentamente a depositar un beso en el nacarado cuello de la joven cuando ella pudo sentir esos labios se estremeció por completo, giraba lentamente su cabeza con la mirada fija en el espejo; Ron termino de besarla y también miro hacia al frente.
-Luces Preciosa… - volvió a besar su cuello. – disculpa que haya tardado en decírtelo. – ahora pasaba sus manos por su pequeña cintura y la abrazaba suavemente.
-jaja Gracias…Ron – le dio una sonrisa muy linda y se giró sobre sí. – pero! Aún falta arreglarme, estoy chaposita. – tocaba sus mejillas poniendo una cara muy graciosa.
-no… Hermione… para nada, te pongas lo que te pongas, siempre te verás preciosa. –ahora pudo dar un beso corto pero tierno en sus labios. – tus mejillas rojizas te hacen ven mucho más linda, por cierto así también estaba mi hermana, ese es un efecto secundario de los vestidos?
Él puso una cara tan graciosa, que no entendía nada de arreglos y vestiditos, Hermione rio mientras pasaba las manos por su cuello y le dio un beso más prolongado, empezaban a avanzar mientras el pelirrojo paseaba sus manos por su espalda, caminaban sin dirección alguna en esos probadores, ella enredaba su delgados dedos en los cabellos encendidos de su novio. Ron ahora empezó a bajar las manos hasta el trasero de la chica, ella dio un respingo, no sabía si hacer eso en el mismo lugar donde estaban sus papas, era lo correcto, siguieron caminando y para ¿su suerte? Ambos cayeron tropezados en el escalón del estrado.
Hermione se terminó de echar en el suelo comenzó a reír, fue una risa tan contagiosa que Ron no tardó en hacer lo mismo, se tocaban cada uno la barriga, es que ya había dejado de ser graciosa la caída, ahora reían porque era una dicha compartir ese momento y reír de una caso aparentemente insignificante como lo es una caída, tal vez no era el momento para “ello” pensaba Ron. Mejor así, porque ahora más que nunca se dio cuenta que quería hacer las cosas de una manera correcta.
La señora de cabellos Negros y la Pelirroja vieron la escena y dejaron de preocuparse, por el ruido pensó que había pasado a mayores, que había sido una caída más grave o que habían roto algo.
-Hija! El vestido, por favor.
-Ronald pareces un niñito! Párate ya mismo.
Ambos chicos que aún seguían bajo los efectos de la risa, Ron dio un salto muy rápido y tiraba de la mano de Hermione para ayudar a que se parara, ella dio una pequeña sacudida al vestido.
-Mama está en perfecto estado, no te preocupes. Pero te quería decir algo del color, me gusta. – Le dio una sonrisa a su madre mientras las señoras tenían las manos en la boca, Hermione lucia muy linda, ella no era de ir a fiestas, mejor dicho las únicas fiestas a las que fue fueron internas Una! De cuarto año, la otra en Quinto para la reunión de Slugorth y el ultimo, la boda de Bill y Fleur. Esas no se cuentan pues en ninguna la Señora Granger y la Señora Molly la habían visto. Se veía muy linda, Jane estaba al borde del llanto pero empezó a ventilarse con las manos.
-Es que mi niña! Te ves preciosa. No imagino como quedaras si te arreglamos a un más eh… yo ya te veo lista para el baile!.
- Ay madre! No… como crees jajaja…
-Lo mismo le dije Señora Granger, pero… oh…ehmm…
-No te preocupes Ronald, mi hija es muy terca, pero la verdad que esta lindísima – al parecer la señora no se dio cuenta que el pelirrojo elogiaba a su hija, pero igual Ron enrojeció como las llamas.
-Será muy afortunado el que te lleve al baile, linda. –Intervino la señora Molly, frotando con cariño los brazos de Hermione.
-Bueno… espero no? – agacho su cabeza, ella sabía que su pareja seria Ron, pero como los bailes que tuvo, jamás fue invitada por él, pues le daba algo de pena, era su ilusión.
-Oh! – las señoras exclamaron al mismo tiempo. Mientras Ron levanto su cabeza y vio a su chica algo pensativa… deprimida.
-Linda! Aun no tienes pareja? Oh bueno tal vez es porque los chicos son así… demoran, pero que eso no te desanime.
-Hijita, no te me pongas así, este baile será diferente porque estaremos ahí, como tradición de dónde venimos. Si no bailas con algún chico, pues bailaras con tu papa no?
-Si! Claro… bailare con papa – sostuvo una sonrisa y luego miro a Ron quien ahora miraba unos detalles en las paredes como si eso fuera más importante ahora. Ambas señoras habían interrumpido el momento, la verdad que Ron pensaba decirle antes que ellas llegaran si quería ser su pareja de Baile, “Strike 2” había ganado, varios puntos, pero también había ganados contras.
 - Hey! Hijo! Ven vamos! Dejemos que la señora Jane ayude a su hija a cambiarse.
- Claro! – cruzo la mirada con Hermione pero ella ahora… ¿no quería verlo?, así lo entendió el.

- Ya es hora de Almorzar mamá – dijo Ginny quien se puso de pie cuando vio a su mamá acercarse a la parte principal del local
- Bueno, prefieren que almorcemos por aquí o esperan a llegar Hogwarts.
-Ya mismo por favor! – ahora se unieron Ron y Harry con Ginny.
- Jajaja bien bien, esperemos a Hermione entonces…
- Señora Molly aún no se han ido, eso me alegra. Quería proponerles que tal si nos juntamos para almorzar, cerraremos un momento la tienda. – dijo el señor Granger bajando las escaleras.
- Escuche almuerzo? – Decía Jane, mientras miraba el reloj principal – wow! Sí que el tiempo se pasó en estos ajetreos.
- Muchas Gracias señores, Señora y Señor Granger, la verdad que sé que mi vestido quedara muy lindo. – dijo Ginny mientras se acercaba para dar un abrazo a cada uno.
- Lo mismo digo señores. Esta tienda será muy conocida en tan poco tiempo, la verdad son grandiosos. – Dijo Harry desde su sitio.
- Gracias también  - se acercó a estrechar la mano de cada uno.
-Eres muy protocolar, Ronald. No pensé que eras así según nos contaba nuestra hija. Tranquilo – dijo la señora Jane mientras daba un abrazo a Ron – De nada, la verdad que lo hacemos con Gusto. Son las personas que más quiere Hermione por aquí, así que les debemos muchísimas cosas, por ello…
Hemrione miraba atenta la escena, sus padres eran muy predecibles, difícilmente le gustaban cambiar de costumbres, ambientes y otras cosas.
-Cariño? Les cuento yo?
- Bueno si crees poder hacerlo.
-qué?
- jajaja solo bromeaba
La cara de Hermione era un definitivo poema de Gestos, parecía que tanto tiempo con Ron se le habían pegado esos hábitos.
-jaja Graciosa… bueno, lo que quiero decirles es que, mi esposa y yo hemos deseado obsequiarles a ustedes los trajes, chicos, como un regalo previo a Navidad y bueno a ustedes Molly y a su esposo Arthur también.
- SI! Así que nos gustaría también conversar un poco más con el de paso y hacemos las medidas de su traje.
- Oh!!! Por Merlyn! Que! Oh! Pero… es demasiado señores, y bueno… wow! Es mucho no se moleste, nosotros les pagaremos los trajes como cree…
- Nonono, por favor permítanos, como un regalo. Aunque sé que con esto no podremos pagar todo lo que ustedes hicieron por nuestra hija, cada uno de ustedes. – Decía la señora Granger, ahora empezó a hablar su esposo y mientras hablaba con Molly y la convencía, Jane bajo la voz sin saber que Hermione podía oírlos – En especial tu. – cojio sus manos y las froto. – Gracias por todo Ronald y  por favor, si no quieres decirme Jane, será entonces Señora Jane? Te parece?
-Claro… eh… muchísimas gracias por todo.
-Bien. Pero creo que tienes algo que hablar con Hermione no? Los dejo, voy a buscar los abrigos para salir.
Hermione se estaba inclinando para poder escuchar bien lo que hablaban. Pero Ron la sujeto a tiempo, pues se estaba empinando mucho.
-Hey! Te vas a caer – empezó a susurrar – por escuchar conversaciones ajenas eh! – cogió su nariz haciendo sonrojar a Hermione.
Todos se abrigaron y salieron a comer a un lugar nuevo, también abierto por padres Muggles, vendían pastas, así que fue del agrado de muchos, comieron conversaron de algunos incidentes y del accidente de Ron y Ginny con el ají en polvo.
Llego la hora de la despedida, solo temporal, para ir a Hogwarts. Regresaron hablando de lo que les esperaba por arreglar en los salones, pero lo que nadie noto en el momento del almuerzo fueron los murmuros entre el señor Granger y Ron; pues nadie sabía que las lecciones empezarían el viernes, terminado el turno del arreglo del patio principal.

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