martes, 16 de agosto de 2011

SOÑE CON HERMIONE_cap 16

CAPÍTULO 16 : “ SUEGROS? ”

Los alumnos se encontraban muy ocupados todo este tiempo, ya habían pasado semanas largas, entre Exámenes, clases, excursiones y actividades deportivas, sin darse cuenta se llegó a fin de año, temporada de fiestas, el grupo de sétimo año decidió hacer una Semana Festiva, por ser su último año en Hogwarts. Constaba de una semana de actividades, no solo mágicas si no también Muggles lo cual fue de agrado de muchos alumnos en la Escuela de Magia.

Era un tema que emocionaba a muchos pero realmente los dejaba agotados a todos, ya estaban a una semana de dicho día 24 de Diciembre en el que se daría por iniciada la Gran Fiesta! Gran parte de los chicos ya tenía elegida sus parejas otros solo las tenía en mente, muchas chicas tuvieron que dar la iniciativa. Así se sentía el ambiente.

Con respecto al Quiditch, la temporada de partidos ya había acabado, dejando como eternos ganadores al equipo Gryfindor. Esta serie de Partidos sí que habían hecho efectos en los alumnos quienes parecía que en vez de aguados abdómenes tenía una súper barra energética de chocolate en el cuerpo eso incluía de todas maneras a Harry y Ron que eran los principales en cada partido.

El pelirrojo andaba algo inquieto, muy cierto que amaba a su castaña pero los pensamientos pervertidos y algo elevados de tono, invadían su conciencia y lo traicionaban, empezaba a desear estar con Hermione tenerla como lo hacía antes, hacerla suya como en sus sueños, pero como todo era un caos, esperaría la Gran Semana Festiva.
-          Harry! – un almohadazo saco al chico de los ojos verdes de su sueño – tienes cara de sueño – Ron hizo una mueca que hizo reír al pelinegro - vamos a relajarnos un rato al campo, yo necesito liberar tensiones, pensé que todo es fácil con magia pf! Esto de arreglar cada detalle para el baile, me tensa – decía el pelirrojo mientras hacía intento de armar su cama.
-          No me pegues con la almohada! – le devolvió el almohadazo anterior – sabes, andaba pensando en cómo pedirle a Ginny, bueno tu sabes…
-          QUE! POTTER!!!
-          AH?? Nono… “eso” no!! Cómo crees? Noo…
-          Entonces? – dijo el pelirrojo más calmado y sentándose en su cama mientras que abría de su cajón una caja de chocolates que le envió Hermione en su último cumple mes. – coge uno… que pasa?
-          Lo que no sé cómo decirle es… bueno para que vaya al baile conmigo…
-          Hay! Harry, preocupas a la gente, nada simplemente díselo no?
-          Que! Ya se lo dijiste a Hermione?

Ron iba a introducir un bombón a su boca y detuvo su trayecto para decir con cara muy pensativa
– emmm… no. Termino de meter el chocolate a la boca y mientras lo masticaba –pego no hay gan coja, jolo pedegle “Amog…”
- Ron!!! Pareces Fleur hablando con la boca llena!

- Jajajaja no inventes!  - decía el pelirrojo tosiendo, al atorarse con dicho bombón – mira, vamos y en el campo hablamos si? De qué hacer y… no sé lo que se nos ocurra.
- Vamos.

En la sala común de Gryfindor se encontraba muy silenciosa, lo que no sabían aquellos chicos es que sus enamoradas estaban escondidas al otro extremo con la capa de invisibilidad de Harry.

-          Quidicth timeee ♫  Quidicth timeee ♫ - cantaban Harry y Ron mientras bajaban ya los últimos escalones y sin escuchar nada ágilmente se movían dos mujercitas para sorprenderlos a ambos por detrás con un enorme abrazo. - Quidicth tii… ♫ AHHHHHHHH!!!
-          Sh!!! QUE ESCANDALO Ronald! , hola mi amor – le dio un beso Ginny casi en la oreja a Harry, mientras que con su mano hacia un gesto de calma a Ron

-          Oh! Ginny! No enfrente mío! – El pelirrojo miro a su castaña y le dijo - Es tan difícil acostumbrarse a esto?

-          Entonces concéntrate aquí – la castaña lo giro de los hombros y lo atrajo hacia ella en un tierno beso – Bueno días Ron

-          Linda! – sonreía como bobo acariciando el rostro de su enamorada aprovechando la cercanía.

-          Ohhhh… gracias – se sonrojo y dio un beso en la nariz a Ron, es nariz tan aristocrática que tenía su pelirrojo.

-          Que hacen aquí chicas, no que hoy les tocaba turno de… no sé cómo es eso del Baile

-          Hermanito… hay!!! Vamos Amor?

-          A dónde?

-          Olvidaste… - miro a su hermano y a Harry a la vez – Lo olvidaron? – al no encontrar respuesta miro a Hermione – Se olvidaron ¬¬ .

-          Ron! Harry! La señora Weasley ya nos está esperando en Hogsmeade.

-          Para que? – dijeron Harry y Ron al mismo tiempo

-          Par de tontos! , oh! Tu no cariño seguro tu si recordabas. – Decia Ginny mientras acariciaba los cabellos negros de su novio.

-          Claro… en eso pensaba hoy en la mañana, pero me olvide cuando me tiraste la almohada.
Dijo Harry mirando a Ron, dando un amistoso golpe en el hombro.


-          AH! Harry ni que te diera amnesia con eso!

-          Bueno… yaya basta vamos entonces. – Hermione sostuvo la mano de Ron y Ginny la de Harry y así salieron y se fueron caminando hablando de unos chistes Muggles que habían aprendido en el tiempo de los preparativos a la fiesta. Llegaron a una Gran tienda, con telas girando y grandes agujas, bordados y cuentas, pedrería de todo tipo, original y de fantasía, las chicas soltaron las manos de sus novios y embelesadas miraban por doquier.

-          Ginny! Hermione! Chicos! – La señora Weasley parecía que estaba en una repartición de Besos, apuren que se acaban! Daba grandes abrazos y los cogía de las manos preguntándoles si habían estado bien, como se sentían, haciéndolos sonrojarse de las atenciones para con ellos.

-          Mama! Esto es wow! Me encanta este lugar – Ginny miraba de un lugar a otro y jalo a Hermione consigo – Mama! Iré a ver nuestros vestidos!

-          Vestidos? Nono YO ME VOY! – Ron estaba a punto de salir de ese lugar pero Hermione que zafó de la mano de Ginny fue directo a él y le explico.

-          Ronald Weasley! Tú no te vas – la señora Molly se sorprendió al ver como Hermione se exalto, esa faceta de la castaña no la conocía, se acercó a su hija y le preguntaba en susurro “Así es siempre?” y ella respondía graciosa con tono despreocupado “Siempre que la saca de sus casillas, pero ahora solo bromea” Harry por otro lado reía y se unía a las dos mujeres que quería. Hermione se sonrojó de golpe y bajo su tono de voz a uno más dulce – amor… te explico, los vestidos serán para mí y Ginny. Ustedes – señalando a Harry y su novio – Usaran Trajes.
-          Pero no como los de cuarto año verdad?

-          Jaja  nono para nada, será muy distinto. Vayan al segundo piso ahí ha de estar papa para que los mida.

-          Qué???!!! – el pelirrojo volvió a palidecer- nono me voy!

-          RONALD! – ahora gritaron Harry, Ginny y la Señora Molly

-          No me pidas que me quede por favor…

-          Ron… - Hermione iba soltando la gran mano de Ron

-          Hermione, no me dijiste que estaban tus papas?

-          Es eso lo que te preocupa?

-          Ehhhmmm…si? – Ron había agachado su cabeza – tus papas están aquí y… no estoy presentable, mira como vengo. Debiste decírmelo.

-          Jajaja Ron!? No te preocupes. Eso es lo de menos, bueno te iba a contar pero con todo lo último pues se hizo imposible, esta tienda de mis papas. Gracias a tus padres lograron hacerse conocidos entre la gente y bueno manejar un buen negocio, para estar también cerca de mí.

-          Mama no me dijiste nada? – Giro su cabeza hacia la señora quien se acercaba.

-          Hay Ron te mande cartas! Pero creo que esa lechuza ya está algo cansado y no llega con los encargos a tiempo. – Todos reían al parecer ya se había relajado el ambiente, pero no…




-          Hermione? Cariño!!!  - la señora de cabello negro sujetado con una coleta salió al encuentro de su hija.

-          Mama!!! Te extrañe muchísimo! – Todos veían la escena con una cara de ternura. Todos menos Ron quien sigilosamente abría la puerta para salir del lugar, pero con lo que no conto fue que la campañilla sonó. Poniendo toda la atención sobre el.

-       Ehhhmmm… es que hace calor y bueno vine con un abrigo muy grueso y…

-          Pero por eso no hay problema, Ronald verdad? Dame tu abrigo, yo lo guardo. 

-          Eh- eh- eh sisisi muchas Gracias Señora Granger, eh – eh –eh – miraba hacia un reloj colgado en la pared – Bue – bue- buenos días señora Granger que tal! – Ron intercambiaba de mano, no sabía con cual saludar, la señora tenía en una mano un guante para no hincarse con las agujas y en la otra llevaba el abrigo de Ron – ehh…. Es una linda tienda me gusta muchísimo.

-          Hola Ronald, muchas gracias, pero deja los formalismos por favor, siéntense llamare a mi marido para que baje a saludarlos. Se pone a cantar cuando trabaja y bueno tal vez no los escucho entrar igual que yo. Pero siéntense por favor.

-          Voy a morir…voy a morir… - Susurraba Ronald mientras su hermana lo escuchaba, Harry se reía y Hermione frotaba su espalda dándole conforte.

-          Ron… lo hiciste muy bien sabes? Con mi madre no necesitas ser tan formal, más bien es una suerte que nos haya atendido ella primero. Mi papa ya baja así que relájate y bota esos caramelos que estas comiendo. No le gusta, sabes que es dentista.

-          Ah…??? – Ron volvió a palidecer, necesitaba aire ahora todos reían viendo la cara de preocupación del pelirrojo. Él estaba que daba rezos pidiendo que se apareciera el alma de Dumbledore y lo protegiera o que su patronus fuera en su defensa, ya no sabía que decir. Solo miraba a su chica con ternura buscando tranquilidad en sus ojos, tenía que hacerlo por ella, la amaba mucho debía ser fuerte porque el realmente quería pasar el resto de su vida con ella.

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